Baterías de segunda mano, alumbrando un futuro más verde y sostenible

15/03/2024 economía circular

El impacto ambiental que generamos cada día se materializa en toneladas de residuos, agotamiento de recursos o contaminación. Avanzar, por lo tanto, hacia un futuro más verde y sostenible se ha convertido en una prioridad, al menos si queremos que las generaciones venideras tengan opción a satisfacer sus necesidades básicas.

Pero alcanzar este objetivo requiere de la puesta en marcha de numerosas acciones, entre ellas, un impulso de las estrategias de economía circular.

¿Cómo iniciar este camino? Pues desde recircular te proponemos que sea con algo tan sencillo como poner en valor las baterías de segunda mano.

Baterías mal gestionadas: negativo para tu bolsillo, nefasto para el medioambiente

Una de las características que definen nuestra sociedad es la tecnología. Nos hemos rodeado de multitud de dispositivos que han llegado a convertirse en una extensión de nuestro propio cuerpo.

Cada uno de estos aparatos porta una batería de la cual extrae la energía para funcionar. Y la fabricación de estas pilas y acumuladores ha requerido de la extracción de toneladas de recursos minerales que comprometen la viabilidad de los ecosistemas.

Si a este punto de partida añadimos una gestión inadecuada de las baterías cuando llegan al final de su vida útil, el impacto negativo de la contaminación es aún más grave.

En este contexto, optar por baterías de segunda mano, dar una segunda oportunidad a estos acumuladores de energía se convierte en una solución sostenible para reducir nuestra huella ambiental.

Baterías de segunda mano, energía para rato

El reacondicionamiento, la reutilización de baterías usadas o su reciclaje permite

  • reducir la demanda de recursos naturales;
  • minimizar la generación de residuos:
  • disminuir el riesgo de contaminación por una mala gestión;
  • ahorrar dinero, y
  • conseguir que la industria avance en sostenibilidad y responsabilidad

Prácticamente todas las baterías de plomo, litio-ion (o ion-litio, Li-Ion, etc.), níquel-cadmio, etc., pueden ser reacondicionadas, reutilizadas o recicladas.

Por ejemplo, existen varios proyectos e iniciativas que prolongan la vida útil de las baterías litio-ion, habituales en los coches eléctricos, usándolas para almacenar energía procedente de fuentes renovables.

Y teniendo en cuenta que la movilidad eléctrica va a ser uno de los trending topics del futuro inmediato, pilas y acumuladores de todo tipo no van a faltar.

Baterías usadas, beneficios para todos

Optar por baterías de segunda mano no solo beneficia al medio ambiente. También ofrece ventajas económicas significativas para los consumidores y las empresas, permitiéndoles ahorrar dinero.

Además, contribuye a la creación de empleos en el sector del reacondicionamiento y el reciclaje, fomentando el desarrollo de habilidades técnicas y promoviendo la innovación en el campo del almacenamiento de energía.

No obstante, las baterías de segunda mano tienen que hacer frente a algunos desafíos. Por ejemplo, la percepción pública sobre su seguridad y rendimiento.

El rendimiento, efectivamente, se reduce conforme se acumulan ciclos de carga y descarga, pero la seguridad no debería ser motivo de preocupación. O no mientras la puesta a punto sea realizada por manos expertas.

Conclusión

Las baterías de segunda mano ofrecen una oportunidad única para avanzar hacia un futuro más sostenible.

Al elegir baterías reacondicionadas o usadas como las que puedes encontrar en nuestra plataforma de valorización, no solo estás tomando una decisión económica que beneficia a tu bolsillo.

También estás participando activamente en la creación de un mundo más limpio y verde para las futuras generaciones.